Membracel es una membrana de celulosa cristalina capaz de sustituir temporariamente la piel. Es un curativo biocompatible, inerte, no contiene adhesivos, atóxico, de textura extremadamente fina y de alta resistencia en estado húmedo. La membrana con poros permite el intercambio gaseoso y el paso del exudado a un curativo secundario. Debido a sus características no es necesario cambiar el producto diariamente, lo que evita traumas, promueve el desarrollo del tejido de granulación y reduce el dolor pues aísla las terminaciones nerviosas y acelera el proceso cicatricial.
El producto fue desarrollado para tratar a la madre del inventor
João Carlos Moreschi, quien padecía de úlceras. Inconforme con la falta de resultados efectivos de los tratamientos convencionales, intentó buscar una solución. João Carlos, poseedor de conocimientos científicos y tecnológicos en el área de microbiología y de celulosa, decidió usar su experiencia para crear un producto eficaz e innovador. Luego de investigar y estudiar intensivamente, creó un producto innovador capaz de eliminar el dolor, dejar pasar el exudado y promover la cicatrización acelerada de las lesiones de la piel: la membrana de celulosa, a la cual llamó Membracel.